La pandemia por el COVID-19, desde el inicio del estado de emergencia, detuvo en el Perú 190,065 empresas, según el Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo. Tras más de ochenta días en este estado, el gobierno ha iniciado este mes la segunda fase de la reactivación económica, que debe darse bajo estrictos protocolos para que las cifras de contagios no se disparen aún más. Para ello, el Ministerio de Salud (MINSA) ha elaborado protocolos con normas sanitarias para el retorno de las empresas peruanas a sus respectivas actividades. ‘Prevención’ es la palabra clave para salvaguardar la salud de todo trabajador.
En ese sentido, el MINSA brinda siete lineamientos que toda institución debe cumplir: limpieza y desinfección de los centros de trabajo, evaluación de la condición de salud del trabajador previo a la reincorporación, lavado y desinfección de manos de forma obligatoria, sensibilización de la prevención del contagio, medidas preventivas de aplicación colectiva, medidas de protección personal y vigilancia de la salud del trabajador en el contexto del COVID-19.
Ante estos requerimientos, ENGIE presenta en el Perú una amplia oferta de soluciones integrales de protección y prevención frente al COVID-19. “En respuesta a la crisis sanitaria, hemos repensado y adaptado nuestros servicios para que brinden apoyo a la prevención y protección de los trabajadores de empresas en esta etapa de retorno a las actividades”, explica Daniel Cámac, Deputy Country Manager de la empresa. Así, mediante el desarrollo de recursos tecnológicos, ENGIE podrá ayudar a que las compañías puedan alcanzar los lineamientos del MINSA, creando ambientes de trabajo seguros, manteniendo la continuidad de las operaciones y permitiendo el ingreso fluido de visitantes a las mismas.
Daniel Cámac, Deputy Country Manager de ENGIE PERÚ.
Entre las soluciones para la detección están las cámaras térmicas para la medición de fiebre, que, gracias a la IA, capturan la radiación corporal; las de detección facial que permiten identificar la presencia de una mascarilla para que la persona pueda acceder o no a determinados ambientes; así como las que se instalan en arcos detectores de metales.
En cuanto a climatización, existen equipos centralizados para esterilizar el aire; filtros para prevenir la propagación de microorganismos; luces UV que se acoplan a los aires acondicionados para eliminar virus y bacterias; entre otros. De esta manera, cada empresa podrá adoptar medidas preventivas de protección para su personal.
En el tema de la desinfección, la solución más novedosa propuesta por ENGIE ha sido el uso de drones, que permiten la esterilización de instalaciones y espacios públicos, limitando la exposición de las personas y maximizando la eficacidad del producto. La minería, la industria en general, centros comerciales, aeropuertos, clínicas o universidades, con aglomeración de personas en espacios abiertos, son los principales sectores que requieren estas tecnologías. De esta manera, “no solo se resguardará la salud de los trabajadores, sino la de todos los peruanos en general”, precisa Cámac.
Daniel Cámac indicó que parte de estas soluciones y servicios serán también donados a hospitales en emergencia, como parte del fondo de US$2 millones para la lucha contra el COVID-19 en Latinoamérica anunciado por ENGIE.
Para más información: services.espe@engie.com
